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viernes, 6 de enero de 2012

Uno ausente, dos en juego.



La luna me habló de nuevos retos cuando le imploré un tiempo muerto.Me dijo que el sufrimiento iba a ser anestesiado por un nuevo cuerpo.No le puso cara, ni nombre, ni fecha de comienzo.Lo vistió de seda, me lo entregó como un trofeo.Le vi en los ojos el deseo, el anhelo de tenerme solo para sus besos.Era nuevo, no conocía mis defectos.Se dejo llevar por mi cara, por mi sonrisa, y por la parte de mi alma que no estaba intoxicada de aquel viejo recuerdo.Yo le dije, le expliqué, le avise.Que no era oro todo lo que me envolvía,que las entrañas las tenía corroídas.No me creyó, o quizá si y pensó que con su amor me curaría de todo el dolor.Me dio su confianza, su amistad; me entregó su corazón.No entendí su afán, intentaba rescatar la vida en un cuerpo que solo albergaba heridas.Él merecía la fortuna de los dioses y yo solo podía darle los restos de un cariño mutable,la mente desafiante de alguien que era habitante de Marte.¿Dónde estaba mi cura? ¿Cuándo se irían las noches de locura? Quería entregar algo más que desechos, quería colmarle de afecto.¿Él?, él era perfecto.¿Yo? Yo la mejor aliada del silencio, del defecto.
Tres latidos, un último intento.
Tres corazones, uno ausente, dos en juego.

2 comentarios:

  1. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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  2. Dios mío, eres muy buena, y la rima es alucinante, desde luego, uno de los mejores blogs que he leido en mucho tiempo :D Me ha encantado, sigue así
    Unbeso
    A, te dejo la direccion del blog mio con una amiga
    http://nolohabiapensadonunca.blogspot.com

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